En ICQO, gracias a la colaboración con el centro médico neurológico Neurotek, contamos con la última tecnología para el diagnóstico temprano de neuropatía de fibra fina a disposición de nuestros pacientes: el microscopio Confocal. El Dr. Juan Durán de la Colina, Director Médico en el Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología, responde las dudas más comunes sobre esta innovadora prueba ocular.
¿Qué es el microscopio confocal?
La prueba de microscopía confocal se realiza con la finalidad de estudiar en vivo la estructura de las diferentes capas de la córnea. Esto permite el estudio de densidad celular, visualizando “cómo es la estructura nerviosa de la córnea y esto hace que una vez analizado en una serie de parámetros, sepamos si las alteraciones que pueda haber en las fibras nerviosas pueden estar asociadas a otras enfermedades, tanto del ojo como otras enfermedades en el organismo” añade el doctor Duran de la Colina.
Si bien no hay a día de hoy ninguna otra tecnología que permita ver las estructuras nerviosas en la córnea, Duran de la Colina indica que esta prueba “parece que viene a sustituir la biopsia de piel, que es mucho más compleja, más larga, obliga a hacer unas pequeñas heridas en ciertas zonas del organismo e incluso es una exploración más cara”.
¿Cómo es la prueba con el microscopio confocal?
Según afirma el doctor: “Este instrumento es incruento, no hace ningún tipo de lesión, no hay incisiones, no hay que hacer ningún daño sobre el ojo” por lo que se trata de una prueba totalmente indolora.
El procedimiento es sencillo, consiste en visionar y capturar imágenes de un monitor conectado al microscopio. Estas imágenes se hacen visibles una vez que el paciente es colocado en la mentonera y se le hace fijar la vista en un punto externo. Entonces se le acerca el microscopio hasta contactar la córnea, aplanándola ligeramente. Siendo una prueba de contacto, la colaboración del paciente es imprescindible.
Estas pruebas pueden realizarse varias veces, lo que permite hacer un seguimiento para ver la evolución de la enfermedad y la respuesta a distintos tratamientos.
¿Qué tipo de personas suelen necesitar esta prueba?
“El microscopio confocal sirve para diagnosticar, o ayudar a diagnosticar algunas enfermedades neurológicas en donde está afectado el nervio periférico y también algunas enfermedades oftalmológicas” explica Duran de la Colina. Por lo tanto, los pacientes a los que se prescribe este examen son aquellos a los que se les detecta alguna distrofia corneal, con la intención de poder distinguir y clasificar distintas infecciones que se dan en la córnea.
Esta prueba también permite medir densidades de células endoteliales a pacientes propuestos para practicarles la cirugía refractiva o cataratas.
Confocal en la oftalmología: su uso clínico
Debido a que dentro del mundo de la oftalmología el número de enfermedades en las que la microscopía confocal puede ayudarnos es muy reducida, no ha tenido un uso muy amplio en nuestra especialidad.
Este microscopio permite:
- Diagnosticar algunas infecciones, como por ejemplo hongos o acantamoeba: Lo cual posibilita empezar a tiempo con un tratamiento, cambiando el curso de la enfermedad.
- Estudiar antes, en el postoperatorio y a largo plazo, las secuelas o los cambios en la estructura de la córnea tras la cirugía refractiva: el doctor asegura que “esto permite hacer estas cirugías con mayor seguridad”, ya que la córnea tiene que tener un mínimo de estabilidad.
- Explorar a pacientes que sufren de molestia o dolor en el ojo y que no mejoran con los tratamientos habituales.
- Diagnosticar a enfermedades que han sido tratadas como “ojo seco” y que no lo son.
“Gracias a esta microscopía confocal, descubrimos algunos daños que sin esta exploración no pueden ser descubiertos y, por lo tanto, nos permite hacer un cambio en la orientación terapéutica que hace que los tratamientos puedan ser más eficaces”
-Doctor Durán de la Colina
El futuro del Confocal
Aún queda mucho por investigar en cuanto a las posibilidades y los beneficios que nos puede aportar esta tecnología en el campo de la oftalmología. Sobre todo a la hora de describir cada lesión de manera más especifica. En palabras del doctor Durán de la Colina: “Aunque nos está sirviendo ya de mucho, todavía queda mucho recorrido para ir estudiando y ver en más detalle lo que nos puede decir esta exploración”
