¿Quién no ha soñado alguna vez con tener ojos de un color diferente? Es una pregunta que, seguro, todos nos hemos planteado en algún momento de nuestra vida. Y es que, sorprendentemente, la mayoría de las personas, cuando se les pregunta, confiesan que preferirían tener los ojos azules o verdes.
El atractivo de un cambio de color
La fascinación por los ojos de un color determinado es algo inherente al ser humano. Al fin y al cabo, son la ventana al alma y, a menudo, son el rasgo más destacado de nuestro rostro. Es por ello que, a lo largo de la historia, se han ensalzado los ojos de colores como el verde o el azul, considerándolos más exóticos o atractivos.
Técnicas arriesgadas y poco fiables
Ante esta demanda social, impulsada por la búsqueda de la perfección estética, han surgido diversas técnicas que prometen un cambiar el color de los ojos. Por ejemplo, la queratopigmentación o la implantación de lentes de color.
Pero, ¿qué hay detrás de esta tendencia y cuáles son los riesgos reales? Tal y como nos advierte el doctor Durán de la Colina, reconocido oftalmólogo en Bilbao y Director médico del Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología (ICQO Bilbao), estas intervenciones “están absolutamente fuera de lo científico” y conllevan riesgos muy elevados para la salud ocular.
¿Por qué son tan peligrosas?
Estas técnicas, habitualmente invasivas, alteran la estructura natural del ojo para modificar el iris, pueden provocar una serie de complicaciones oculares a largo plazo. Entre las más comunes se encuentran:
- Glaucoma: Un aumento de la presión intraocular que puede dañar el nervio óptico y provocar pérdida de visión.
- Cataratas: Opacificación del cristalino que dificulta la visión.
- Infecciones: La introducción de instrumentos en el ojo puede favorecer la aparición de infecciones oculares graves.
- Cicatrices: Las intervenciones quirúrgicas pueden dejar cicatrices en la córnea, lo que afecta la calidad visual.
Alternativa a la operación de cambio de color de ojos
Una alternativa más segura y reversible al cambio de color de ojos son las lentillas de colores. Estas lentes, al colocarse directamente sobre el iris, permiten modificar temporalmente el color de los ojos sin necesidad de una intervención quirúrgica. Sin embargo, es fundamental adquirirlas en establecimientos especializados y asegurarse de que estén homologadas por las autoridades sanitarias.
El uso de lentillas de mala calidad o no ajustadas correctamente puede provocar infecciones oculares, irritación y otros problemas visuales.
Ética y responsabilidad en la oftalmología
En ICQO Bilbao, entendemos que la oftalmología es una disciplina que debe ejercerse con la máxima ética y responsabilidad y nuestra prioridad son los pacientes. Por ello, nuestras intervenciones quirúrgicas siempre tienen como objetivo mejorar la salud visual y únicamente se realizan cuando son necesarias y no pongan en riesgo su visión. Con una simple revisión ocular, podemos detectar cualquier problema visual y ofrecer las soluciones más adecuadas para cada caso.
Los ojos son un órgano vital que nos permite disfrutar del mundo que nos rodea. Por ello, es fundamental cuidarlos adecuadamente y acudir al oftalmólogo de forma regular. PIDE CITA EN ICQO BILBAO.
En conclusión, el deseo de cambiar el color de los ojos es algo comprensible, pero no debemos olvidar que la salud visual es lo más importante. Las técnicas que prometen un cambio radical de color son peligrosas y pueden causar daños irreversibles. En ICQO Bilbao, te ofrecemos un enfoque responsable y personalizado para cuidar de tus ojos y mantener una visión saludable a lo largo de toda tu vida.
¿Tienes alguna duda sobre la salud ocular? No dudes en consultarnos. En ICQO Bilbao estaremos encantados de atenderte.