La exposición a los rayos UV, el cloro, la arena, el sudor y otros factores hacen que nuestros ojos sean más vulnerables a diversas afecciones y aumenten las visitas al oftalmólogo. Te contamos cuáles son las afecciones más comunes en consulta del Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología en Bilbao (ICQO).
1. Inflamaciones: la blefaritis, una protagonista
Una de las consultas más frecuentes en verano son las relacionadas con las inflamaciones oculares. La blefaritis es un claro ejemplo de ello. Esta afección se caracteriza por una inflamación de los párpados, que puede causar enrojecimiento, picazón, sensación de cuerpo extraño y, en algunos casos, pérdida de pestañas.
Causas de la blefaritis:
- Trastornos de la piel: La rosácea es una de las causas más comunes de blefaritis.
- Infecciones bacterianas o por ácaros: Estos microorganismos pueden proliferar en los párpados y desencadenar la inflamación.
- Alergias: El polen, el polvo o ciertos cosméticos pueden provocar una reacción alérgica en los párpados.
Síntomas:
- Enrojecimiento e hinchazón de los párpados.
- Picazón y sensación de quemazón.
- Formación de escamas o costras en las pestañas.
- Sensación de cuerpo extraño en el ojo.
- Lagrimeo excesivo o sequedad ocular.
Tratamiento:
- Limpieza regular de los párpados con champú para bebés o soluciones oftálmicas específicas.
- Aplicación de compresas tibias para aliviar la inflamación.
- Antibióticos o antiinflamatorios, si es necesario.
2. Moscas volantes: cuando la visión se enturbia
Las moscas volantes son pequeñas manchas o hilos que flotan en el campo visual. Aunque pueden aparecer a cualquier edad, es común que se manifiesten con mayor frecuencia en verano, especialmente cuando se observan fondos claros, como el cielo o una pared blanca.
Causas:
- Envejecimiento del gel vítreo, la sustancia que llena el interior del ojo.
- Desprendimiento posterior del vítreo.
- Otras afecciones oculares, como la miopía alta o la diabetes.
Síntomas:
- Manchas o hilos que se mueven al mover los ojos.
- Sensación de destellos luminosos.
Tratamiento:
- En la mayoría de los casos, las moscas volantes no requieren tratamiento y suelen mejorar con el tiempo.
- Si las moscas volantes son muy molestas o interfieren con la visión, el oftalmólogo puede recomendar otras opciones, como la vitrectomía.
3. Otras consultas frecuentes en verano
Además de la blefaritis y las moscas volantes, en verano también son comunes las siguientes consultas:
- Conjuntivitis: Inflamación de la conjuntiva, la membrana transparente que cubre la parte blanca del ojo y el interior de los párpados.
- Fotoqueratitis: Quemadura de la córnea causada por una exposición excesiva a los rayos UV.
- Cuerpos extraños: Entrada de arena, polvo u otros objetos en el ojo.
- Alergias oculares: Reacción alérgica a sustancias como el polen, el cloro o los cosméticos.
Prevención y cuidados
Para prevenir estas afecciones y mantener una buena salud ocular durante el verano, te recomendamos:
- Utilizar gafas de sol de calidad: Protege tus ojos de los rayos UV con gafas de sol que bloqueen al menos el 99% de los rayos UVA y UVB.
- Llevar un sombrero de ala ancha: El sombrero te ayudará a proteger tus ojos del sol directo.
- Lavarte las manos con frecuencia: Evita tocar tus ojos con las manos sucias.
- Utilizar gotas artificiales: Si sientes los ojos secos, utiliza gotas artificiales para lubricarlos.
- Evitar el contacto con el cloro: Si nadas en la piscina, utiliza gafas de natación para proteger tus ojos del cloro.
- Acudir al oftalmólogo regularmente: Realízate revisiones oculares periódicas para detectar cualquier problema a tiempo.
El verano es una época maravillosa para disfrutar al aire libre, pero es importante cuidar de nuestros ojos. Si experimentas cualquier molestia ocular, no dudes en consultar a un oftalmólogo. Un diagnóstico y tratamiento adecuados te permitirán disfrutar de una visión saludable durante todo el año.
