En el contexto del Día Mundial de las Personas de Edad, que se celebra el día 1 de octubre, es importante recordar que los problemas visuales asociados a la edad afectan directamente a la calidad de vida y a la autonomía de las personas mayores.
Problemas visuales más comunes en las personas mayores:
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de mil millones de personas padecen afecciones visuales, muchas de las cuales son prevenibles o tratables. A medida que se envejece, aumenta el riesgo a sufrir diversas patologías oculares, que se deben abordar de manera adecuada para evitar la perdida parcial o total de la visión.
Asimismo, las enfermedades oculares más frecuentes en personas de edad avanzada son:
- Presbicia: Pérdida gradual de la capacidad de enfocar objetos cercanos.
- Cataratas: Opacificación del cristalino que dificulta la visión.
- Glaucoma: Aumento de la presión intraocular que puede dañar el nervio óptico.
- Degeneración macular: Deterioro de la mácula, la parte central de la retina.
- Ojo seco: Reducción de la producción de lágrimas que provoca irritación y sequedad ocular.
10 Consejos para cuidar de la visión a partir de los 40 años:
Por este motivo, los oftalmólogos del ICQO aconsejamos a los pacientes:
- Realizarse exámenes oftalmológicos periódicos
- Hidratar los ojos para evitar el ojo seco
- Limitar la luz solar directa, seguir una dieta sana
- Mantener los niveles normales de presión arterial, colesterol y glucosa.
¿Cómo afecta la visión a la independencia?
La autinomía de las personas mayores puede verse significativamente limitada debido a los problemas visuales, que pueden causar:
- Dificultades para ver de noche
- Dificultad distinguir contrastes o leer
- Caídas y accidentes, especialmente en el hogar.
- Alteraciones en los ciclos de sueño y afectar nuestro estado de ánimo.
Los problemas oculares pueden alterar los ciclos normales del sueño, ya que a medida que pasa el tiempo, los ojos absorben menos luz azul y como consecuencia, el cuerpo produce menos melatonina, que es la hormona encargada de regular los ciclos de sueño-vigilia. Además, se estima que los problemas relacionados con el sueño están más presentes en pacientes de glaucoma y enfermedad ocular diabética.
Otro de los motivos, por los cuales la visión afecta notablemente a la independencia de las personas mayores, es la dificultad para ver de noche o distinguir contrastes. Esto da lugar a caídas que pueden provocar lesiones graves y que con mayor frecuencia ocurren en el hogar.
Así lo explica el doctor Sergio Eguiza, que asegura que “quienes tienen una visión más reducida por problemas de glaucoma, cataratas o degeneración macular son más propensos a dar un mal paso”. Asimismo, afirma que este problema se puede mejorar realizando pequeños cambios como incluir alfombras antideslizantes y asegurar barandillas en el domicilio.
Por último, el doctor concluye recordando que “una buena prevención en casa es imprescindible, puesto que muchos de los tropiezos se producen en el hogar” pero no solo basta con esto, sino que es necesario mejorar las condiciones visuales.
La importancia de una revisión oftalmológica
La visión es un tesoro que debemos cuidar a lo largo de toda la vida. Siguiendo estos consejos y acudiendo regularmente al oftalmólogo, podemos prevenir muchas enfermedades oculares y mantener una buena calidad de vida. Recuerda, una buena visión es sinónimo de independencia y bienestar.
¿Cada cuánto debo visitar al oftalmólogo?
La frecuencia de las revisiones oculares varía según la edad y las condiciones de cada persona. En general, se recomienda una revisión anual a partir de los 40 años, especialmente si se presentan síntomas como visión borrosa, fatiga ocular o dificultad para adaptarse a la luz. Además. si tienes alguna enfermedad crónica como diabetes o hipertensión, o si tienes antecedentes familiares de problemas oculares, es fundamental que consultes a tu oftalmólogo con mayor frecuencia.
En el Instituto Clínico Quirúrgico de Oftalmología en Bilbao (ICQO), nuestros oftalmólogos te ofrecen un diagnóstico preciso y un tratamiento personalizado para cualquier problema visual, a cualquier edad.