La Baja Visión es un problema creciente debido, fundamentalmente, al incremento de la longevidad, si bien puede presentarse a cualquier edad por motivos genéticos o hereditarios, entre otros. Actualmente, en España, hay más de 2 millones de personas que padecen baja visión y que no han recibido tratamiento para rehabilitar ese resto de visión que aún conservan, lo que les ayudaría a mejorar su calidad de vida.
Aquellas personas que mantienen cierto grado de visión útil pueden beneficiarse de la adaptación de ayudas ópticas. Estas ayudas deben ser prescritas y adaptadas por un especialista en Baja Visión en función del resto visual disponible y de las tareas visuales que desee realizar el paciente. La adaptación de ayudas de baja visión es siempre un complemento a los tratamientos médicos/quirúrgicos y no sustituye a una consulta oftalmológica.
¿Qué es la Unidad de Baja Visión de ICQO?
En el ICQO, contamos con una unidad de Baja Visión que dirige su trabajo principalmente hacia aquellos pacientes cuya agudeza y/o campo visual no ha mejorado tras los adecuados tratamientos médicos y/o quirúrgicos. Se intenta asegurar que el paciente no pierde su independencia y su autonomía por no haber sacado el máximo provecho al resto visual que aún conserve.
Recientemente se ha creado la asociación Retina Bizkaia Begisare cuya finalidad es mejorar la calidad de vida de las personas que padecen este tipo de enfermedades. La presentación oficial tendrá lugar el próximo 5 de noviembre el Colegio Oficial de Médicos de Bizkaia.