El 14 de Noviembre se celebró el Día Mundial de la Diabetes.
El desarrollo de nuevos tratamientos y cambios en el estilo de vida conducen a un mejor control metabólico de la diabetes; pero esto también conlleva a un aumento de prevalencia de aquellas complicaciones que requieren tiempo para desarrollarse, como es el caso de la retinopatía diabética (RD).
El tiempo de evolución de la diabetes, junto con la edad en el momento de diagnóstico de la misma, son los factores que más inciden en la prevalencia de la retinopatía.
Los pacientes con una duración de la enfermedad inferior a 5 años no suelen presentar ningún signo de RD, mientras que con más de 10 años de enfermedad la prevalencia de RD es del 27% y con más de 30, del 90-95%. Por todo esto, «es fundamental extremar las revisiones una vez el paciente ha sido diagnosticado de diabetes».
«Nuestra recomendación es que los diabéticos tipo sean examinados a los 5 años del diagnóstico y posteriormente cada año. Para los diabéticos tipo II es en el momento de diagnóstico y anualmente a partir de entonces», señala el oftalmólogo de ICQO. Se considera que el riesgo de ceguera en pacientes diabéticos es 25 veces superior al resto de la población.
Sintomatología y tratamientos de la ceguera por causa de diabetes
Aunque se trata de la causa más frecuente de ceguera legal en pacientes con edad laboral activa, la RD es asintomática en sus comienzos. La sintomatología clínica es variable y no necesariamente se correlaciona con la gravedad de la RD. Así, los pacientes pueden sufrir una pérdida brusca de agudeza visual o acusar trastornos en la percepción de colores, metamorfopsias y alteraciones en la visión nocturna.
Según explica el doctor Araiz, «los tratamientos actuales de la RD son altamente eficaces para prevenir la pérdida grave de agudeza visual». Eso sí, dado que la mayoría de los pacientes con RD permanecen asintomáticos hasta grados avanzados de la enfermedad, una derivación del paciente diabético al especialista para controles periódicos y un tratamiento temprano son esenciales para el control de la enfermedad.
Entre las opciones terapéuticas actuales de la RD se incluyen: la fotocoagulación láser de la retina, la vitrectomía, o la administración intravítrea de corticoides.
Fuente: ICQO. Noticias Cuatro / Agencias | BILBAO